Internacional

Haití continúa paralizado en medio de amenazas, protestas y crisis de combustible

Decenas de personas manifestaron por segundo día consecutivo en la ciudad de Puerto Príncipe por la falta de alimentos, combustible y en general, por la grave crisis económica y política que ha provocado una ola de violencia y secuestros en el país. Mientras que una banda criminal pidió la destitución del primer ministro, otra pandilla exige un millonario pago de 17 rehenes norteamericanos.

Parece que no hubiera nada o nadie que sacara a Haití de todas sus crisis y estuviera condenado a seguir siendo la nación más pobre de América.

Este martes 26 de octubre, se cumplen dos días de manifestaciones en las calles de Puerto Príncipe para pedir el fin de tanta violencia por parte de bandas armadas y la crisis que ha provocado la falta de combustible.

Sin embargo, muchas personas decidieron no participar y quedarse en casa o cerrar sus negocios, pues, la falta de combustible ha afectado al transporte público, las actividades comerciales e incluso los hospitales del área metropolitana de la capital advirtieron de su incapacidad para seguir brindando asistencia sanitaria, ya que dependen de generadores diésel para garantizar la electricidad en sus instalaciones.

Algunos habitantes de Puerto Príncipe han logrado conseguir combustible de forma ilegal. Pero, si un galón de gasolina en las estaciones de servicio cuesta alrededor de 2 dólares, el precio en el mercado negro asciende a los 20 dólares por galón.

La escasez de carburante se debe a los bloqueos en las carreteras que impiden el acceso de los camiones a los depósitos ubicados en la zona portuaria de la ciudad. Esta situación ha sido provocada por varias pandillas haitianas que han ganado fuerza y que, para reabrir las vías, exigen la renuncia del primer ministro, Ariel Henry.

Uno de estos grupos es el llamado G9 Family and Allies, considerada la pandilla más grande y poderosa de Haití. A la cabeza del grupo está Jimmy Cherizier, quien pidió este martes, en una conferencia de prensa improvisada en una calle de Puerto Príncipe, la renuncia de Henry.

“Estamos pidiendo que el primer ministro Ariel Henry renuncie, no porque tengamos un problema personal con él… su nombre ha sido citado como alguien que participó en el asesinato del presidente Jovenel Moïse”, dijo Cherizier.

El líder de G9 también negó que el grupo estuviera secuestrando personas y dijo que, si se probaba, “entregaría todas” sus armas y haría “justicia”.

El millonario rescate por 17 personas secuestradas en Haití

Mientras unos piden la renuncia del primer ministro Ariel Henry, las autoridades estadounidenses y haitianas continúan trabajando para asegurar la liberación de los 12 adultos y cinco niños, incluido un niño de 8 meses, que fueron secuestrados el pasado 16 de octubre por parte de miembros de la banda 400 Mawozo.

Los secuestradores exigen un millón de dólares por cada persona retenida. Los misioneros y menores de edad que viajan con ellos hacen parte de la organización Christian Aid Ministries, con sede en Estados Unidos.

Este martes, el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo que Estados Unidos había desplegado “un número significativo de especialistas en el cumplimiento de la ley y especialistas en recuperación de rehenes” en Haití.

El asesinato del presidente Jovenel Moïse el pasado 7 de julio, un terremoto que dejó al menos 2.200 muertos el pasado 14 de agosto, la violencia callejera y la inestabilidad política y económica en Haití son todos los componentes de esta bomba de tiempo que explotó y que le ha dado más poder a los grupos armados.

Una tercera jornada de huelga general en el país está convocada para este miércoles, a la que se han unido miembros de la industria del transporte afectados por los bloqueos en las carreteras.

Con Reuters, EFE y AP

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *