Es mi obligación moral ayudar, terapeuta que trata a los amputados de la guerra de UCRANIA
Si puedo ayudar, ¿por qué no hacerlo?».
Desde hace un año el terapeuta español Jorge Aranda viaja a un hospital de Leópolis, en el oeste de Ucrania, para tratar a militares ucranianos con miembros amputados.
Normalmente viaja por el mundo para ayudar a personas que han perdido brazos o piernas por accidentes o ataques de tiburones.
En 2016 creó la fundación Hands with Heart (“Manos con corazón”) y desde entonces
viaja con otros terapeutas por diferentes países para mejorar las vidas de niños con dolores óseos o musculares.
Entre 2021 y 2023, más de 74.000 ucranianos han sufrido amputaciones por causa de la guerra.
Aranda atiende a los pacientes más difíciles: los que no pueden dormir, se asustan con cada sonido o sufren los llamados “dolores fantasma”.