Wilkin Peguero “Mantequilla” dice que teme por su vida
Wilkin García Peguero, mejor conocido como Mantequilla, dijo la noche de este miércoles temer por su vida, ya que alega haber sido objeto de abuso de poder y de una campaña sucia.
“Nosotros hemos sido objeto de abuso de poder, prácticamente de manera directa y radical, y hemos sido sometido a una campaña negativa y sucia de parte no sé de quién, para que nosotros como compañía no crezcamos”, dijo Mantequilla momentos en que acudió a la sede central de la Policía Nacional para querellarse tras el accidente donde murió su madrastra y uno de sus hombres de confianza.
Además, manifestó que debido a la “presión mediática” no ha podido continuar con sus obligaciones en la empresa 3.14 Inversiones World Wide SRL, a través de la cual supuestamente multiplica el dinero, por lo que hizo un llamado a sus clientes a mantener la calma.
“Mantengan la calma, que nosotros como compañía no nos vamos a quedar con un centavo, y le vamos estar resolviendo su dinero de manera responsable”, aseguró García Peguero, al tiempo que indicó que el dinero de sus inversionistas está cien por ciento garantizado “porque esta es una compañía que, si funciona”, reiteró.
Mantequilla estuvo ayer en el Palacio de la Policía Nacional, a donde intentó poner una denuncia tras el accidente de tránsito ocurrido la noche de martes en la carretera de la comunidad Ana Santana, entre Sabana Grande de Boya y Monte Plata, donde fallecieron Dulce María Romero (su madrastra) y Kelvin de Jesús Felipe Reyes.
En el hecho también resultó herido el padre de Mantequilla, Felipe Reyes, quien habría sido trasladado a un centro de salud en Santo Domingo.
Se recuerda que Wilkin García Peguero había decidido cerrar el local de su empresa, ubicada en Sabana Grande de Boyá, provincia Monte Plata.
La razón habría sido por “el desorden de los clientes” que llegan al lugar y se amontonan para exigir el pago de su dinero.
Este había pedido a sus inversionistas que les permitieran pagarles a aquellos que tienen atrasos con fecha de 23 y 24, al tiempo que prometió asistir casa por casa a pagarles a sus deudores.