Villa Mella atrapada en la fila: caos matutino en Mamá Tingó deja a cientos varados»
En Villa Mella, salir temprano de casa ya no garantiza llegar a tiempo. Desde las primeras luces del día, una fila interminable de personas se forma en la estación Mamá Tingó, donde la desesperación y el cansancio se mezclan con el vapor del café y la ansiedad del reloj.
A las 7:00 de la mañana, la estación ya parece desbordada. La fila para recargar la tarjeta envuelve la entrada; la fila para abordar el tren serpentea por la acera. Hay empujones, quejas y rostros de resignación.
“Esto es inhumano. Si no sales antes de las 6:00, ya sabes que vas a llegar tarde”, afirma Julio Méndez, mensajero. Él, como cientos, ha perdido oportunidades laborales por retrasos recurrentes.
El congestionamiento no es nuevo, pero sí cada vez más agudo. La comunidad clama por una mejora inmediata en la logística de entrada y en el flujo de pasajeros. Entre las demandas: extensión de horarios, incorporación de más personal en las taquillas y sistemas digitales de recarga más eficientes.
Mientras tanto, Villa Mella sigue atrapada en la fila.