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Una agradable experiencia con un empleado modelo de Banreservas

Tomado del Instagram de Asela María Lamarche.

«ALGÚN DÍA LA HISTORIA NO ESCRITA, SE ESCRIBIRÁ»…

JUNIOR NAIN, DIRECTOR DE OPERACIONES DEL BANCO DE RESERVAS.

Santo Domingo.-

La noche está en calma.

Extrañamente no se escucha ningún sonido. La voz suave y pausada, de Junior Nain al otro lado del teléfono me da paz. Su extrema caballerosidad, me conmueve. Mientras me explica, un error de un volante que una empleada escribió, que sin embargo no ha afectado para nada ni un centavo de mis modestos ahorros de toda una vida.

Asela: Mis cuentas resisten todo tipo de arqueos señor Naín – le digo.

Junior: Así es doña Asela, toda una vida entrevistando tantas personalidades, sin embargo sus ahorros son modestos, nosotros sabemos la mujer que es, por eso este pueblo la quiere y admira tanto.

Asela: Gracias del alma..Quiero aprovechar para preguntarle ahora, ¿todo eso que sale en las redes son leyendas urbanas entonces? ¿No es cierto que en los bancos se producen sustracción de dinero de los ahorrantes?

Junior: Nada es imposible en esta vida, pero le aseguro que los sistemas operativos del Banco de Reservas y de toda la banca dominicana en estos momentos son muy robustos.

Asela: ¿Qué tiempo tiene usted en el Banco de Reservas?

Junior: 35 años, doña Asela.

Asela: ¡Dios mío!, y ¿a que edad entró?

Junior: A los 16 años como auxiliar de suministro. Yo era el jovencito que le llevaba a todos los empleados los suministros, tengo ahora más de una década como director de operaciones pero para mí nada ha cambiado sigo siendo el mismo. Desde que vine de San Pedro de Macorís, mi padre que murió recientemente por el covid-19 y es el golpe mas duro que he recibido en mi vida, nos lo dejó muy claro, un hombre no se valora por lo que tiene ni por el cargo que ocupa, sino por lo que es como ser humano. Soy un servidor público; para eso me pagan, para servirles.

Asela: Tengo tanto tiempo, don Junior, viéndole siempre tan correcto, sencillo, noble. Siempre dispuesto a ayudar. Pienso que usted sino es el mejor empleado que tiene el Banco de Reservas debe estar en los primeros lugares. ¡Gracias por tanto!

Junior: Gracias a usted por confiar en nosotros.

Asela: Debería escribir un libro, don Junior.

Extrañamente no se escucha ningún sonido. La voz suave y pausada, de Junior Nain al otro lado del teléfono me da paz. Su extrema caballerosidad, me conmueve. Mientras me explica, un error de un volante que una empleada escribió, que sin embargo, no ha afectado para nada ni un centavo de mis modestos ahorros de toda una vida.

https://www.instagram.com/p/CNoENOSLOMn/?igshid=2zsrhodt86l7

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