Las personas con más éxito tienen estos siete hábitos sencillos. Si tú también, desbloquear tu potencial es pan comido
Aunque el éxito es un término escurridizo con un significado diferente dependiendo de a quién le preguntes, seguro que si te digo el nombre de Bill Gates o el de Oprah Winfrey, éxito es una palabra que te vendrá a la cabeza. Dinero será otra. Pero esta vez no necesitamos lo segundo para alcanzar lo primero, porque lo que les distingue de los demás es, en muchos casos, los hábitos que tienen a diario y que les ayuda a triunfar. Y son sencillos pasos que todos podemos dar para avanzar en nuestro desarrollo personal.
Hacen journaling
Jack Dorsey, cofundador de Twitter y Block, fue capaz de equilibrar la gestión de ambas empresas con una rutina rigurosa que, como explican en Business Insider “incluía levantarse temprano, meditar, hacer ejercicio y ayunar”. Afirmó en 2015 que tenía jornadas de 18 horas que empezaban a las 5 a. m. y terminaban a las 11 p. m. con las que intentaba “crear una rutina consistente». Spoiler: no necesitas imitar sus 18 horas de actividad para ser feliz ni para impulsar tu desarrollo. Del millonario solo tienes que copiar un hábito y es escribir a diario
En este caso, y como lo que nos interesa es cumplir los objetivos, vamos a dejar de lado sus dietas incomprensibles y su estilo de vida alejado del que cualquiera podría llevar para centrarnos en el último hábito que explicaba en la CNBC que seguía: escribir un diario. Dorsey escribe sobre su día en la aplicación Notas de su iPhone. “Intento hacerlo todos los días, normalmente cuando estoy terminando la jornada”, aseguraba. Existen estudios que avalan la eficacia del journaling, una especie de diario personal cuya mayor virtud es que es completamente libre. Cada uno puede escribir como quiera en función de su creatividad, tiempo y ganas. Puede ser una nota en el móvil, un cuaderno que tengamos en la mesita de noche o una agenda, y lo que escribas en él es algo completamente libre también. Desde un diario de gratitud como recomienda el psicólogo Adam Grant a un diario de reflexión en el que volcamos pensamientos tristes o incómodos.
Establecen objetivos claros y específicos
Es muy poco probable que alcancemos nuestros objetivos si estos no están bien establecidos. Establecer objetivos especificos alcanzados y claros que tienen muchas personas exitosa. Te pongo un ejemplo. No sirve de nada tener como objetivo “hacer más deporte”. En cambio, podemos ponernos un objetivo medible y alcanzable que sea “participar en la San Silvestre vallecana del año próximo». Nos damos un tiempo (es bueno que los objetivos tengan un tiempo de ejecución), nos permite focalizar una meta y es perfectamente medible. Este nivel de especificidad nos permite realizar” ingeniería inversa» de los pasos necesarios para lograr el objetivo. Por ejemplo, comenzar por correr cinco kilómetros para ir aumentando la distancia con el tiempo. Así, lo dividimos en partes manejables que podemos ir consiguiendo poco a poco.
No se trata solo de tener una idea vaga de lo que quieres lograr, sino de ser específico, dividir tus objetivos en tareas más pequeñas y manejables, y revisarlas y ajustarlas periódicamente según sea necesario, para lo que el journaling nos puede servir como guía de ruta. Un consejo: no revises cada día cuáles son y cómo has avanzado con ellos porque no sería realista y resultaría frustrante. Dedica por ejemplo el primer día del mes en tu diario para hacerlo, revisarlos y modificarlos si fuera necesario.
Dicen que “no” a menudo
Warren Buffet afirma que la diferencia entre la gente exitosa y la gente realmente exitosa es que la gente realmente exitosa dice no a casi todo. Es uno de los hábitos más poderosos que existen porque nos ayuda a establecer límites y a centrarnos en nuestras prioridades para tomar mejores decisiones. Tu activo más valioso es el tiempo y cuando decimos que sí a todo y a todos, terminamos por sentirnos sobrecargados, y no conseguimos concentrarnos en nuestros objetivos principales.
La clave es darnos cuenta de que cada “sí” implica implícitamente un “no” a otra cosa. Cuando aceptas ir a una fiesta a la que no te apetece, estás diciendo no a un tiempo de autocuidado. Cuando dices que sí a esa reunión, estás diciendo no a una hora de trabajo. Cuando asumes un proyecto que no se alinea con tus objetivos, estás diciendo no a oportunidades que podrían acercarte a tus sueños. Cuando tengas claras tus prioridades y objetivos será más fácil decir que no. Eso sí, no te conviertas en alguien ermitaño que no sale de casa para ver a otros seres humanos porque en el equilibrio está el secreto que nos lleva al siguiente hábito.
Se rodean de personas que les aportan
Podríamos decir que tu círculo íntimo es una poderosa herramienta. La motivación de tu familia, el ánimo de tus amigos, el trabajo de tus compañeros. Todas las relaciones que tienes en tu vida pueden ayudarte a alcanzar tus objetivos. El entorno, en particular las personas con las que pasamos la mayor parte del tiempo, tiene un impacto en nuestra mentalidad, nuestras acciones y, por lo tanto, en nuestro éxito y desarrollo personal. Las relaciones nos brindan apoyo, estímulo, orientación y, en ocasiones, las oportunidades necesarias para crecer. El éxito no es un camino que se recorre en solitario, así que rodéate de quien te sume siempre.
Simplifican sus decisiones
Cuando a Bill Gates se le ocurrió su llamada “teoría del armario” buscaba evitar situaciones que le hacían perder tiempo. Mark Zuckerberg lo hace, y Steve Jobs también lo hacía. Hablamos de simplificar en la medida de lo posible las decisiones que tomamos cada día. Es decir, reducir la carga cognitiva reduciendo la toma de decisiones. Ellos lo hacían con la ropa, simplificando su armario, pero podemos hacerlo con cualquier cosa. Por ejemplo, desayunando todos los días lo mismo.
El psicólogo Barry Schwartz argumentó que una gran cantidad de opciones puede causarnos ansiedad por la toma de decisiones, así que hacerlo sencillo, puede ser un gran secreto de productividad. No siempre es fácil aplicar la simplicidad en el trabajo, pero favorece que tengamos la mente despejada y contemos con más tiempo que podemos emplear en lo realmente importante. Focalizar la energía en lo que de verdad importa.
Comienzan el día con ejercicio
Oprah Winfrey asegura que su éxito se debe a dominar una rutina diaria en la que comienza su mañana meditando, escribiendo un diario y haciendo ejercicio físico para que la energía se pueda mantener a lo largo de todo el día. Como Bzaarrecogia Harpers , da mucha importancia a llevar una buena vida que le haga feliz, priorizando la positividad para mantener la energía, y practicando la atención plena para mejorar su estado de ánimo y su productividad.
Tienen un diálogo interno positivo
La autoconversación positiva, enfocada en el marco de psicología positiva, puede tener efecto en nuestro autoconcepto y en nuestro éxito. Existe poder en tener un diálogo interno positivo, como podemos ver en Simone Biles, que siempre usa la frase puedes con esto para ganar confianza. La intencionalidad en nuestras conversaciones, segun el psicologo Franz Breentano dirige a un acto o suceso determinado hacia un objeto o meta situada en el mundo externo. Es decir, nos prepara para conseguirlo y como es consciente, se puede autorregular. Podemos darnos un boost de energía con un diálogo interno positivo.