República Dominicana es nuestra
Por Daniel García Santana
República Dominicana no se puede arrodillar frente a Haití o cualquier organismo, como Amnistía Internacional, porque es libre y soberana o se hunde la isla, como sentía y nos enseñó el patricio Juan Pablo Duarte.
Amnistía Internacional, como otras entidades foráneas, debe ayudar a Haití dentro de su territorio, porque la lamentable situación de ese país no es responsabilidad de República Dominicana.
Presidente Luis Abinader, cuenta con el apoyo de dominicanos valientes y que les duele el país para enfrentar a Amnistía Internacional u otros aspirantes a atentar contra la soberanía y la paz de nuestra nación, que hemos levantado con mucha sangre, sudor y lágrimas, pese a que aún no contamos con el Estado perfecto para todos.
Siempre he respaldado la ayuda humanitaria de República Dominicana a Haití, de forma voluntaria, sin injerencia o presión de algún otro país u organismo internacional.
Lamentablemente, República Dominicana no está en condiciones de continuar cargando con el peso de Haití en sus hombros, porque, a veces, carecemos de recursos suficientes para resolver las decenas de problemática histórica nuestra, en las áreas de salud, educación, viviendas y otras sociales.
Confiamos en que algún día, los países poderosos, junto a organismos internacionales, como la Organizaciones de las Naciones Unidas (ONU), levantarán de entre sus cenizas a Haití, por el bien de sus habitantes, incluyendo a mujeres y niños, quienes sufren desde hace años por la barbarie de las bandas gobernantes de ese pobre país, en complicidad con mal llamados funcionarios y militares, sin que eso implique un sacrificio de República Dominicana más allá de la ayuda humanitaria posible. ¡Viva República Dominicana!.