Los duques de Sussex son los miembros de la familia real británica menos respetuosos con el medio ambiente

Un nuevo estudio llevado a cabo por el portal SaveOnEnergy, que ayuda a los consumidores a descubrir cuáles son las opciones energéticas más baratas y eficientes a su alcance, ha llegado a la conclusión de que son los miembros de la familia real británica que llevan un estilo de vida menos respetuoso con el medio ambiente.

Esta información puede resultar muy chocante, en vista de que gran parte de su agenda como ‘royals’ y su activismo posterior se ha centrado precisamente en la lucha contra la contaminación y el cambio climático. El príncipe Enrique ha ayudado a crear incluso una compañía llamada Travalyst que promueve un tipo de turismo sostenible, que reduce el impacto negativo de los viajes en la naturaleza y redirige la riqueza a las comunidades locales.

Sin embargo, el uso de jet privados que tantas críticas les valió a los duques de Sussex tras el nacimiento de su primer hijo ha hecho que no salgan demasiado bien parados en la evaluación basada en un sistema de puntos y centrada en un período de tiempo desde marzo de 2019 hasta principios de este año. Al parece, el hecho de que realizaran las donaciones necesarias para equilibrar su huella de carbono después de utilizar cuatro vuelos privados en menos de dos semanas no ha sido suficiente para salvarles de acabar al final de la lista en octava y décima posición, junto a su cuñada, la duquesa de Cambridge, que está en el noveno puesto.

El número uno de esta clasificación lo ocupa el príncipe Carlos por su trabajo con organizaciones medioambientes en distintas iniciativas en las que a menudo también participa su esposa Camila, lo que ha contribuido sin duda a que la duquesa de Cornualles se lleve la medalla de bronce, por detrás de su suegro el duque de Edimburgo. El resto de la lista la ocupan, por este orden, la reina Isabel II, la princesa Ana, el príncipe Eduardo y el príncipe Guillermo.

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