El Panadero narra como asesinó y se deshizo del cuerpo de una niña de 9 años
El expediente acusatorio contra Starlin Santos, El Panadero, narra como este mató y se deshizo del cuerpo de la niña Liz María Sánchez, de nueve años de edad, en agosto del 2020, muerte que conmocionó al país.
El acusado declaró en los interrogatorios que estranguló a la niña para evitar que esta diga a sus padres que durante semanas él había manoseado sus genitales aprovechando que esta acudía a su casa y se sentaba en sus piernas para que le prestara el celular.
En el documento ejecutado por el Ministerio Público dijo que conoció a la niña hacía tres meses y que dos semanas después empezó a sentirse atraído por la menor.
Sostiene que le prestaba su teléfono celular para que ella viera muñequitos y jugara los juegos que le había descargado, en esos momentos se aprovechaba para manosearla y tocar sus partes íntimas, y que, a la niña quedarse tranquila continuaba manoseándola. Agrega que en diversas ocasiones la Liz Mary visitaba su casa para jugar con su hijo.
Contó que la niña lo amenazó con decirle a sus padres la acción que este estaba cometiendo en su contra, declaración que lo puso nervioso y cuando la niña se marchaba la agarró por el cuello empezó a estrangularla.
“Ella trataba de defenderse, cuando ella dejó de moverse introduje el cuerpo en un saco vacío de harina de trigo color blanco, en la cabeza le puse una funda negra para que nadie la pudiera ver si se salía del saco, luego la coloqué en el canasto del motor», confesó Starlin.
En esa misma línea, detalla que, antes de tirar a la Liz al Mar Caribe, simuló ante su hijo que ella estaba dormida en su cama, acomodando las almohadas, y siéndole que no la despertara.
Al preparar el escenario dijo que tomó su motocicleta que estaba estacionada en el callejón frente a su casa, se dirigió a la estación de combustible a cargar gasolina, y al regresar, como su hijo aún estaba dormido, aprovechó para montar el cuerpo de la niña que estaba dentro del saco en la parte trasera de la motocicleta.
Luego se dirigió hacia el Obelisco que está cerca de la Marina de Guerra para lanzar el cuerpo, pero al llegar y notar que había muchas personas, se retiró de allí y continuó hasta la autopista Las Américas donde lanzó el cuerpo.