BEBES OZEMPIC embarazos sorpresa suscitan dudas sobre fármacos para perder peso
Catera Bentley contempló fijamente el resultado positivo de la prueba de embarazo y no podía creer lo que veía. Se hizo una segunda prueba y luego una tercera. Estaba embarazada.
Llamó a su marido al trabajo y le dijo que había una araña gigante en casa de la que se tenía que deshacer. Fue corriendo a casa y, cuando llegó, Bentley le dio la noticia. Ambos rompieron en llanto.
La pareja, que vive en Steele, Alabama, llevaba más de dos años intentando concebir, pero el médico de Bentley le había dicho que tal vez no sería posible debido a sus antecedentes de síndrome de ovario poliquístico, conocido como SOP.
La noticia la había dejado sintiéndose sin un propósito. «Lo único que quería era ser madre y esposa», dice Bentley, de 25 años. «Estuve deprimida, gravemente deprimida durante todo ese tiempo».
Cinco meses antes, en octubre de 2022, Bentley había empezado a tomar Mounjaro para perder peso. Durante los primeros meses, dijo, perdió unos 18 kilos. Sus ciclos menstruales, que habían sido irregulares debido al síndrome de ovario poliquístico, se normalizaron. Incluso se sintió más feliz.
«Me sentí como una persona totalmente nueva. Cada día estaba de mejor humor», afirma.
Bentley esperaba que perder peso le ayudara a lograr el embarazo y había oído hablar de otras personas que habían perdido peso con la inyección. Pero cuando finalmente quedó embarazada antes que lo que esperaba, se preocupó por los efectos que podría tener en el bebé.
Fuente: CNN